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Sostenibilidad y sustentabilidad

¿Sabes cuál es la diferencia entre sustentabilidad y sostenibilidad? Normalmente, cuando sustentable se aplica a la argumentación para explicar razones o defender, en tanto que lo sostenible es lo que se puede mantener durante largo tiempo sin agotar los recursos.

«Sostenibilidad» y «sustentabilidad» son términos que a menudo se utilizan indistintamente para describir prácticas que buscan garantizar el equilibrio entre las necesidades actuales y las futuras, tanto a nivel ambiental, social y económico. Aunque algunos los consideran sinónimos, hay quienes señalan ciertas diferencias sutiles en su uso.

Sostenibilidad y sustentabilidad
La movilidad eléctrica contribuye tanto a la sostenibilidad, como a la sustentabilidad
  • Sostenibilidad: Este término se refiere a la capacidad de mantener o preservar un determinado sistema o recurso a lo largo del tiempo. Implica la capacidad de satisfacer las necesidades presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las suyas. En este sentido, la sostenibilidad se centra en la continuidad a largo plazo de los sistemas naturales y humanos, así como en la gestión responsable de los recursos para evitar su agotamiento.
  • Sustentabilidad: Este término es más común en algunas regiones, como América Latina, y se utiliza de manera similar a «sostenibilidad». Sin embargo, algunos argumentan que «sustentabilidad» se centra más en la capacidad de sostener o mantener algo, mientras que «sostenibilidad» abarca más aspectos de equidad social y justicia ambiental. En otras palabras, «sustentabilidad» podría hacer hincapié en la capacidad de mantener algo sin necesariamente referirse a la equidad intergeneracional o a la justicia social.

Por tanto, aunque estos términos pueden usarse indistintamente en muchos contextos, algunos prefieren «sostenibilidad» por su enfoque más amplio en la equidad social y la justicia ambiental, mientras que otros utilizan «sustentabilidad» como una forma regionalmente preferida de referirse al mismo concepto.

En última instancia, ambos términos apuntan hacia la necesidad de adoptar prácticas y políticas que aseguren un equilibrio armonioso entre las necesidades presentes y futuras de las sociedades humanas y del medio ambiente.

Ver también: movilidad eléctrica y desarrollo sostenible