La logística de última milla es fundamental para toda la cadena de ventas online, y mejorar su eficiencia es clave. Aunque el gigante Amazon se centra principalmente en la logística de almacén, la compañía también cuenta con un negocio de entrega a domicilio, donde la innovación también juega un papel destacado en el envío de los pedidos para hacerlos llegar a los clientes por tierra y aire en el menor tiempo posible.
En diciembre de 2016, la compañía realizó su primera entrega con drones con Prime Air en el Reino Unido. Este servicio, que promete envíos de paquetes pequeños en 30 minutos, sólo está disponible en dos localidades de Estados Unidos y se expandirá el próximo año a una tercera ciudad americana y dos países europeos: Reino Unido e Italia.
Por tierra, la marca Amazon se mueve por las calles con una bicicleta eléctrica y remolque -modalidad habitual en Japón- y una moto eléctrica cubierta que recuerda a una pequeña furgoneta de reparto. En España puedes ver carros eléctricos de paquetería de la empresa española MOOEVO, diseñados específicamente para el centro de las ciudades.
La elección del lugar de lanzamiento es una respuesta a «una combinación de dónde el dron puede volar mejor, dónde funciona mejor y dónde hay clientes interesados», explicó Jason Patrao, director de ciencia, ingeniería y tecnología aérea de Prime como parte de su proyecto «Delivering The Future”.
Patrao detalló que ya hay más de 2.000 clientes registrados en el servicio en Estados Unidos y hay un número «suficiente» de drones para gestionar sus compras. De momento se limita a entregas a viviendas con jardín, pero la idea es ampliarlo próximamente a viviendas con grandes espacios o jardines exteriores, no terrazas ni tejados.
Pime Air utiliza actualmente el dron MK27, pero las nuevas aperturas se beneficiarán del último modelo MK30, que realiza despegues y aterrizajes verticales y utiliza un sistema de sensores y visión por ordenador con aprendizaje automático para identificar nuevos obstáculos en vuelo. sin tener que conocer el entorno de antemano.
Por tierra, la marca Amazon se mueve por las calles con una bicicleta eléctrica y remolque -modalidad habitual en Japón- y una moto eléctrica cubierta que recuerda a una pequeña furgoneta de reparto. En España puedes ver carros eléctricos de paquetería de la empresa española Mooevo, diseñados específicamente para el centro de las ciudades.
La joya de la corona, sin embargo, son las furgonetas eléctricas de Rivian. Los primeros vehículos entraron en servicio en 2022 y actualmente hay más de 10.000 en circulación en Estados Unidos y unos 300 en Alemania, aunque Amazon apunta a llegar a los 100.000 en 2030.
Según Amazon, los Rivian fueron diseñados desde cero teniendo en cuenta «la seguridad, la sostenibilidad y la comodidad de conducción». Pesan 2,5 toneladas, lo que dificulta su introducción en países como España, donde el permiso de conducción que permite conducir furgonetas no es el adecuado dado el peso de este vehículo.
Además, los vehículos de reparto son analizados con un nuevo sistema de inspección automatizado llamado AVI para detectar y reportar defectos como defectos en neumáticos o elementos deformados en la carrocería antes de que se conviertan en un problema durante el viaje.
Esta tecnología, utilizada en una especie de túnel por donde circula el vehículo, realiza un escaneo en segundos, identificando problemas y clasificándolos según su gravedad. Actualmente se utiliza en EE. UU., Canadá, Alemania y el Reino Unido en colaboración con la empresa de tecnología UVeye.
Esta apuesta por los vehículos eléctricos y los métodos de entrega alternativos está en línea con el objetivo de la compañía de lograr cero emisiones netas de carbono para 2040.
